La conducta y Los Metodos Didacticos
El modelo conductista, según Jean Pierre está
basada en los estudios psicológicos de B.F. Skinner e Ivan Pávlov sobre el
aprendizaje. Con este tipo de aprendizaje generalmente se dan los medios para
llegar al comportamiento esperado y verificar su obtención; el problema es que
nada garantiza que el comportamiento externo se corresponda con el mental.
Por ello podemos definir el método conductista como
un método orientado al desempeño superior, selectivo a los "más
aptos", con dificultades en la transparencia de la identificación de los
estándares y requerimientos técnicos, basándose en los aspectos personales para
el desempeño, midiendo valores, o desvalores, del individuo el cual se ve
incitado a la superación personal e individual, aunque contenga elementos de
trabajo colectivo. La competencia en este modelo describe fundamentalmente lo
que un trabajador "puede" hacer y no.
Dentro del marco teórico, el Conductismo se desarrolló a comienzos del siglo XX; siendo su figura más destacada fue el psicólogo estadounidense John B. Watson.
A partir de 1920, el conductismo fue el paradigma de la psicología académica, sobre todo en Estados Unidos. Hacia 1950 el nuevo movimiento conductista había generado numerosos datos sobre el aprendizaje que condujo a los nuevos psicólogos experimentales estadounidenses como Edward C. Tolman, Clark L. Hull, y B. F. Skinner a formular sus propias teorías sobre el aprendizaje y el comportamiento basadas en experimentos de laboratorio en vez de observaciones introspectivas.
Desde 1950, los psicólogos conductistas han producido una cantidad ingente de investigaciones básicas dirigidas a comprender cómo se crean y se mantienen las diferentes formas de comportamiento. Estos estudios se han centrado en:
1. las interacciones
que preceden al comportamiento, tales como el ciclo de la atención o los
procesos perceptuales
2. los cambios en el
comportamiento mismo, tales como la adquisición de habilidades
3. los cambios en el
comportamiento mismo, tales como la adquisición de habilidades
4. las condiciones
que prevalecen sobre la conducta, tales como el estrés prolongado o las carencias
intensas y persistentes.
En el modelo Conductista, el desarrollo del currículum y de los proyectos de formación están basados fundamentalmente en los objetivos, pudiendo ser definidos estos como la conducta a realizar al final del proceso formativo y su obtención a través de los resultados, dejando en un segundo término como instrumentos o medios para conseguir ese fin el resto de los elementos (contenidos, metodología, recursos, evaluación, e incluso al formador), que se convierten en estímulos, a la vez que los resultados del aprendizaje en respuestas estereotipadas del alumnado participante a los cursos, con los refuerzos correspondientes positivos de carácter personal, tales como repeticiones, premios o castigos, o tecnológicos, como la utilización de medios audiovisuales, (los MAV).
En el modelo Conductista, el desarrollo del currículum y de los proyectos de formación están basados fundamentalmente en los objetivos, pudiendo ser definidos estos como la conducta a realizar al final del proceso formativo y su obtención a través de los resultados, dejando en un segundo término como instrumentos o medios para conseguir ese fin el resto de los elementos (contenidos, metodología, recursos, evaluación, e incluso al formador), que se convierten en estímulos, a la vez que los resultados del aprendizaje en respuestas estereotipadas del alumnado participante a los cursos, con los refuerzos correspondientes positivos de carácter personal, tales como repeticiones, premios o castigos, o tecnológicos, como la utilización de medios audiovisuales, (los MAV).
La educación
basada en competencias, lejos de ser una educación dividida, de corte
conductual y fragmentada, tiene ventajas que inciden significativamente en
diferentes áreas del proceso educativo, abriendo perspectivas más dinámicas, integrales y críticas.
La educación
basada en competencias se centra en la necesidad, estilos de aprendizaje y
potencialidades individuales para que el alumno llegue a manejar con maestría
las destrezas y habilidades señaladas desde el campo laboral.
En otras palabras,
una competencia en la educación, es un conjunto de comportamientos sociales,
afectivos y habilidades cognoscitivas, psicológicas, sensoriales y motoras que
permiten llevar a cabo adecuadamente una profesión.
Así las
competencias se acercan a la idea de aprendizaje total, en la que se lleva a
cabo un triple reconocimiento:
- Reconocer el valor de lo que se construye.
- Reconocer los procesos a través de los cuales se ha realizado tal construcción
- Reconocerse como la persona que ha construido.
La construcción de
competencias no puede realizarse de manera aislada, sino que tiene que hacerse
a partir de una educación flexible y permanente, desde una teoría explícita de la cognición, dentro de un marco
conceptual, en un contexto cultural, social, político y económico.
La educación
basada en competencias se refiere, en primer lugar, a una experiencia
práctica y a un comportamiento que necesariamente se enlaza a los
conocimientos para lograr sus fines. Deja de existir la división entre teoría y
práctica porque de esta manera la teoría depende de la práctica, implica la exigencia
de analizar y resolver problemas y de encontrar alternativas frente a las
situaciones que plantean dichos problemas, la capacidad de trabajar en equipos
multidisciplinarios y la facultad de aprender a aprender y adaptarse.
La evaluación en un modelo por competencias se desarrolla a través de
procesos por medio de los cuales se recogen evidencias sobre el desempeño de un alumno, con el fin
de determinar si es competente o todavía no para manejar los diferentes
aprendizajes.
Con respecto a las
publicaciones del enfoque de competencias en el ámbito educativo, son varias
las aportaciones, que hablan de competencias en los niveles de educación
básica, media superior, superior y en posgrado relacionadas con aspectos de diseño curricular, perfiles de egreso, competencias
profesionales, competencias de los docentes, entre otras que se ubican en un nivel más
genérico de abordaje.
Las competencias
en el ámbito educativo, se diversifican ejemplo: es común hoy día hacer
referencia en los espacios académicos a los diseños curriculares por
competencias, a la evaluación del aprendizaje por competencias y al desarrollo
de competencias para el uso de las Tecnologías de la Información y la
Comunicación, dan auge al tema de competencias.
Se puede decir que
el conocimiento como acumulación de saber no es significativo, su valor radica
en el uso que se hace del mismo, por tanto, las escuelas con esta perspectiva
deben replantear los programas educativos desde el desarrollo de
competencias y de su aplicación a situaciones de la vida real, a partir de
enfoques centrados en el aprendizaje en donde el estudiante participe en su
construcción y de esta manera le encuentren sentido a las actividades de
aprendizaje, a partir de los métodos didácticos pensados con la finalidad de
fortalecer y desarrollar competencias (básicas, genéricas, especificas y
transversales).
Es bastante interesante aprender acerca de los diferentes comportamientos y las habilidades a través de ejemplos q han dejado los diferentes precursores de la didáctica, este material tiene información relevante a esto y me fue de gran ayuda para elaborar una tarea relacionada con la didáctica
ResponderEliminarEsta muy interesante me puede servir en un futuro
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarMuy interesante me ha ayudado mucho para realizar trabajos acerca de ello.y en lo personal me a ayudado a incrementar mis conocimientos pedagogicos lo cual me sirvira mucho como futuro pedagogo.
ResponderEliminarServira
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